
¿Qué queda al final?
Hemos terminado. Se ha clausurado la “Colonie Champagnat 2022” con una bonita fiesta donde no faltó de nada: regalos, bailes, música a tope… Se proclamaron las puntuaciones de los distintos equipos y hubo felicitaciones para todos. Para el cierre de actividades se reservó el teatro. Cada grupo, en días anteriores, preparó una representación. El propio “jefe” de grupo dirigió los ensayos. Hoy llegaron provistos de sus disfraces para recrear la historia. Fueron 10 historias diferentes pero coincidentes en la temática. Yo no salía de mi asombro. Viendo mi extrañeza, el coordinador de la “colinie” me dijo: Es realmente lo que viven en sus casas, en sus ambientes. Os cuento. Todos los equipos eligieron casos de niños o niñas que no pudieron estudiar, no les fue posible aprovechar la formación de la escuela. El primer grupo nos representó la historia de una niña, muy lista, que todos los días pasaba delante de la clase cargada de frutas para vender en el mercado. Se detenía en la ventana escuchando a la profesora muy interesada en lo que explicaba. La profesora se interesó por su problema y decidió buscar a la familia para que escolarizara a la niña. Encontró a sus padres pero no lo consiguió. El segundo equipo lo puso más trágico. El caso de una niña que disfrutaba en la escuela con sus compañeros y aprovechaba la educación del profesor. Un día su padre volvió a casa y preguntó a la madre dónde estaba la niña. Al saber que iba a